
Todo empezó en el año 1965 cuando nuestro padre recién llegado de Alemania decidió iniciar un negocio para instalarse nuevamente en nuestro país. Surgió la oportunidad de coger el traspaso de un horno tradicional en el Puerto de Sagunto y aquí con la mayor ilusión empezó nuestra andadura.
Era un horno tradicional en el que se elaboraba pan, bizcochos y dulces básicos. Tras un corto periodo de tiempo, un cliente acostumbrado a comprar el pan a diario en el horno de nuestros padres, llamó a la puerta para ofrecerles una oportunidad, sería el momento clave evolucionar el negocio a algo más sofisticado.